Cómo solicitar el certificado energético

¡Por fin! Sí, no nos mires así, ¡que estamos dándote la enhorabuena! Después de todo el proceso por el que has pasado con tu inmueble, todo este tiempo en el que has estado tratando de encontrar al candidato ideal, ese que existía en tus sueños, ahora nos encanta disfrutar de tu embarcación avanzando a toda vela en dirección a estribor. Ya solo te falta mostrar el certificado energético y lo tendrás en el bote…

Solicitar Certificado energético

¿Cómo? ¿Que no sabes qué es el certificado energético? ¿Que todavía no dispones del tuyo? Pues tenemos un problema, capitán. Nuestro barco acaba de golpear con la quilla en el suelo y han volado por los aires todas las cartas de navegación que nos guiaban. Así, a pleno día y sin estrellas, vamos a tener que echar el ancla un instante y realizar acopio de fuerzas para continuar con esta tarea.

Porque sí, hoy te queremos explicar cómo solicitar el certificado energético. Con él los vientos soplarán siempre a nuestro favor. Dejaremos de ser un grumete para convertirnos en un marinero. Y, sobre todo, que sin él no podemos ni vender ni arrendar nuestro inmueble.

Qué es el certificado energético

Lo primero de todo es despejar las dudas. No podemos llevarte al bar más famoso de los piratas si no alcanzamos previamente la Isla Tortuga.

El certificado energético es un documento que informa sobre la eficiencia energética de un inmueble. Este va a ser clasificado en función de la energía que consume.

Como si de un examen de instituto se tratara, tu inmueble tendrá que superar la prueba que calificará su validez en cuanto a eficiencia energética. Elemento que será fundamental a la hora de la venta, pues tendremos que mostrarlo siempre que sea requerido con carácter preceptivo. Es decir, que no podrás retrasar el momento como cuando hacías con tu madre al llegar con una mala nota procedente del instituto.

¿Es obligatorio el certificado energético?

Como todo elemento burocrático que se precie, su carácter es totalmente perceptivo. Es decir, que no te vas a poder librar de realizar el procedimiento para obtener el certificado energético de ninguna manera. Es requerido para todo negocio en el que cambie la posesión de un inmueble, ya sea alquiler o compraventa.

Sin querer realizar una disertación acerca del gran sentido que tiene perder tanto tiempo en papeleos inservibles, preferimos mantenernos neutrales e indicar que en lo relativo al certificado energético nos mostramos proclives a garantizar su importancia. Todo comprador o arrendador estará a cargo de los pagos derivados de los consumos energéticos del hogar, por lo que querrá asegurarse que tiene en su mano la mejor opción posible.

Al fin y al cabo, se trata de una tendencia que se da en todos los sectores. Siempre abogamos por aquel que consume menos. Ya sean vehículos o electrodomésticos, es un elemento que tomamos en consideración a la hora de tomar una decisión. Si es que al final, incluso cuando salimos a tomar una cerveza, buscamos siempre el aspecto económico.

Cómo obtener el certificado energético

Pero bueno, no va a ser todo una plaga de malas noticias. También nos caracterizamos por tratar de ayudar al prójimo en lo que necesiten. Por ello te vamos a dar cuatro pasos sencillos para obtener el certificado energético.

Sí, te prometemos que con este camino de migas de pan el trayecto será más fácil que robarle un caramelo a un niño. Estás a punto de tener la posibilidad de poder presumir delante de tus amigos de que tú, únicamente tú, lograste la obtención del certificado energético sin perder los nervios. Proeza solo al alcance de los héroes más serenos de la historia de la humanidad. No todos llevan capa,  ¿verdad?

Estos cuatro pasos para obtener el certificado energético y no morir en el intento son:

  1. Visita a la vivienda del técnico certificador.
  2. Cálculo de la calificación energética.
  3. Obtener el certificado energético.
  4. Registro del certificado energético.

Sobre el papel no parece una tarea demasiado complicada, ¿verdad? No te confíes, que en los planes todo es fácilmente asumible. Zeus derrocó a los titanes sin más complicaciones pero Bilbo tuvo que hacer frente a mil y un imprevistos antes de obtener la joya del Rey en los dominios de Smaug. Tan solo tuvo que enfrentarse a la normalidad de una tempestad inesperada que arrasaba todo a su paso. Pero si él lo logró, siendo un hobbit, ¿cómo no vas a conseguirlo tú?

Visita a la vivienda del técnico certificador

Esta es la primera tarea a acometer. Tenemos que estar preparados. Ya sabes lo que dicen de levantarse con el pie izquierdo, así que, salvo que seas zurdo, vamos a chutar esta piedra del camino lo más lejos posible.

¿Alguna vez has estado en una cita a ciegas? No te preocupes entonces, que esto es algo bastante parecido. Recibirás en tu hogar la visita de alguien del que no sabes muy bien qué comportamiento esperar. Los primeros instantes serán incómodos, os vigilaréis mutuamente para entender qué es lo que está haciendo la contraparte.

Por ello es tan importante que evites analizarle como si se tratara de un extraterrestre que acaba de amerizar en mitad de uno de nuestros océanos. Solo es un técnico certificador que te va a guiar en el camino para obtener tu certificado energético.

Por supuesto, y fuera de toda duda, lo primero que tienes que hacer es ponerte en contacto con el técnico certificador. Puedes buscar en el registro de tu zona y concertar una cita. Por mucho que desees obtener el certificado energético, este no va a aparecer si nosotros no damos el primero de los pasos. Dicen que en la vida todo lo que importa requiere de que movamos los hilos en primera instancia. Este caso no será diferente.

Una vez te atrevas a tomar la iniciativa llegará la hora y la fecha oportuna. Desconfía de aquellos que lleguen tarde. Si no tienen el tiempo tan en cuenta como tú, tampoco sabes con qué precisión ejercerán el resto de sus tareas. Bueno, este consejo lo puedes aplicar a todo lo relacionado con la vida, no únicamente a la obtención de este certificado energético.

Una vez se encuentre en tu vivienda se pondrá manos a la obra. Sus tareas son claras, así que no te preocupes, que sabrá perfectamente cómo moverse en este entorno:

  • Elaborará un croquis del lugar que se servirá de primera aproximación a esta realidad.
  • Tomará medidas de las dimensiones de la vivienda.
  • Revisará los materiales de la fachada y de los cerramientos.
  • Inspeccionará instalaciones de calefacción y climatización.

Todo ello lo realizará con su tez de profesional. Concentrado en su tarea, empleará la mirada de los expertos. Tu vivienda se sentirá juzgada, por supuesto, pero lo será por una buena causa. Estará abogando por lograr la mejor nota en uno de los exámenes más importantes de su vida, así que luego no escatimes en la tarea de premiarla.

Cálculo de la certificación energética

Una vez que haya obtenido toda la información necesaria, el técnico certificador introducirá los datos para el cálculo de la nota que tu certificado energético merezca. Para ello realizará los siguientes pasos. Ya no tendrás que estar como testigo, así que en esta tarea ya disfrutarás de la vida que obligaciones burocráticas como esta te succionan a cada instante.

Los siguientes pasos son:

  • Realizará el plano de tu inmueble. En él introducirá todo el conocimiento obtenido acerca de este. Será determinante para el otorgamiento del certificado energético.
  • Introducirá los datos en un software informático. Este será el encargado de calcular la certificación energética.

Como cuando eras un estudiante universitario, estamos seguros de que conocer qué entra en esta prueba podrá reducir la ansiedad que todo examen produce a quien va a enfrentarse al mismo. Así, para determinar qué graduación del certificado energético se merece tu inmueble se tomarán en cuenta las siguientes variables:

  • Materiales de cerramiento exterior.
  • Carpinterías.
  • Tipos de ventanas y cerramientos.
  • Sistemas de climatización.

Obtención del certificado energético

Toda esta información se pondrá en marcha en una coctelera camuflada en forma de programa informático. Valorará todas las variables con la celeridad a la que solo los sistemas 2.0 son capaces de alcanzar y nos otorgará la calificación pertinente. Esa que acompañará a nuestro certificado energético.

Este es el punto donde tienes que mantener la calma. Entendemos que no todos los días te enfrentas a una espera con tanta tensión, pero no merece la pena acabar con las uñas de nuestras manos. Por ello en Globaliza nos gusta siempre recordar que las tareas importantes de la vida no solo cuentan con una oportunidad, sino que podemos volver a enfrentarnos a su dureza cuando nos sintamos preparados para tal hazaña.

De esta manera, el propietario del inmueble recibirá junto al certificado energético un dossier con propuestas a mejorar en el hogar. Así, podrá ponerlas en práctica y pugnar de nuevo por una calificación.

Esta nota se muestra en un intervalo que alcanza desde la G hasta la A. Siendo la primera vocal de nuestro abecedario la nota más elevada que se puede obtener en este certificado energético.

Registro del certificado energético

Como todo lo que merece la pena en la vida, no se puede disfrutar sin compartirlo con todos. Necesitamos generar las envidias pertinentes, que también tiene mucha importancia. Por ello, antes de que te lances a Instagram, Facebook o Twitter y les enseñes a todos tus seguidores la gran nota que has alcanzado en esta dura prueba, tendrás que superar los trámites oportunos para que cuenten con validez legal.

Para lograr este importante reconocimiento tendrás que acudir al órgano competente de tu Comunidad Autónoma. Este será el encargado de expedir la etiqueta oficial que le recuerde al mundo la nota que tú has logrado obtener.

El proceso no es automático. Requiere la previa revisión por este órgano de la información brindada por el técnico certificador para asegurarse de que no hay ningún elemento incorrecto.

El registro no tiene la necesidad de ser ejecutado por el propietario. En muchos casos es el propio técnico certificador el que lo realiza.

¿Cuál es el precio de un certificado energético?

No existe un criterio preestablecido sobre el precio de un certificado energético. No obstante, lo más habitual es que la cantidad oscile entre los 150 y los 300 euros. Desconfía de quien supere o baje de esta cantidad.

 

Ahora que ya estás preparado para solicitar tu certificado energético no dejes que el tiempo pase. ¡Estás ante un paso necesario para poder vender o arrendar tu vivienda!

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