No hay nadie que se salve. Todos hemos tenido en alguna ocasión un vecino ruidoso. Quien teclea estas líneas se ha enfrentado durante mucho tiempo a una niña que ensayaba con un piano a horas donde incluso un adulto debería estar metido en la cama, seguro que tú has disfrutado de la melancolía en forma de ladrido del perro de uno de tus compañeros de calle. Por eso, hoy te queremos enseñar cuáles son los límites máximos de ruido que se presentan de cara a una convivencia sana.
¿Cuál es un nivel de ruido aceptable según la ley?
Lo primero de todo es reconducirte a este artículo sobre qué medidas tomar contra un vecino ruidoso. Nosotros también somos conscientes de que las emociones que a veces nos suscitan no se encuentran dentro de la legalidad. Pero siempre es mejor tomarse una tila y actuar que seguir el caudal sangriento de nuestros impulsos.
Por si acaso eres profano en la materia, lo primero que tienes que saber es que el ruido se mide en decibelios (db). Una unidad que establece que el oído humano solo puede escuchar aquellas acústicas que se hallan entre los 0 y los 130 db. Todo lo de fuera queda lejos de nuestro entendimiento, aunque ello no quita que altas cuantías en el interior del intervalo nos produzcan un verdadero dolor de cabeza.
Asegurarte cuál es el nivel máximo de ruidos de manera cuantificada es muy complicado. Después de todo, son los Ayuntamientos los que regulan la cantidad de decibelios permitidos y esta varía en función de la ciudad y sus circunstancias. Sin embargo, sí que existe un patrón habitual sobre el que se construyen estas normas y es a él al que nos vamos a referir.
Niveles máximos de ruidos según la tipología de vivienda
Residencial |
Administraciones y oficinas | Sanitario | Educativo y cultural |
Dormitorios: 35 | Despachos profesionales: 35 | Habitaciones: 35 | Aulas: 35 |
Resto de habitaciones: 40 | Oficinas: 40 | Resto de estancias: 40 |
Zonas de lectura: 30 |
El nivel de inmisión de ruido es lo que cuenta
Este es un detalle muy importante que, en ocasiones, nos olvidamos de explicar. A la hora de calcular su un ruido está superando el umbral que permite la norma se tiene en cuenta el nivel de inmisión. No el de emisión. Es decir, la cantidad de ruido que llega hasta a ti y no el que se produce en sí.
¿Has tenido en alguna ocasión problema con algún vecino? ¿Has sido tú el causante de este ruido? Nos interesan todas las historias, así que te animamos a que nos las dejes en los comentarios.