Una de las zonas donde hay que tener más cuidado con la educación del perro es el cuarto de baño. Se trata del escenario ideal para que realice todo tipo de trastadas, pero tenemos que estar preparados para todo lo que pueda ocurrir.
Un cuarto de baño, un perro y un sinfín de gamberradas
Seguimos avanzando por el interior de tu hogar para preparar cada una de las estancias ante la llegada de tu próximo perro. El baño resulta uno de los lugares clave ante dicho acontecimiento.. Por tanto, te queremos ayudar con los tres puntos claves donde debes centrar la mirada:
- Cuchillas y demás instrumentos afilados.
- El papel higiénico lo carga el diablo.
- Acostúmbrale a la ducha.
Cuchillas y demás instrumentos afilados
Todos decimos que somos muy ordenados, pero a la hora de la verdad esta convicción erra cada día. Al final, pasa lo que pasa, que tenemos un montón de instrumentos desperdigados por el cuarto de baño, sin preocuparnos lo más mínimo por ellos.
Cuando el perro llegue hasta nuestro hogar, no podemos permitirnos más flaquear ante estos fallos. Después de todo, dejar una cuchilla a su alcance puede devenir en catástrofe, así que tengámoslo claro desde el primer momento.
El papel higiénico lo carga el diablo
Nosotros no sabemos qué es lo que tiene el papel higiénico que vuelve locos a nuestros compañeros perrunos. Por alguna razón, estos sienten una predisposición natural a jugar con este. Les llama poderosamente estirar y sacarlo todo del rollo de cartón.
Hay pocas cosas en las que un perro y un gato se parecen, pero seguro que podrían disfrutar de una cita descargando papel higiénico con aires seductores.
Acostúmbrale a la ducha desde el primer momento
Un secreto que seguro que ya sabes. Son muy pocos los perros a los que les gusta el agua, y todavía menos la ducha. Por ello, esos intentos de ducharlos acaban por convertirse en un suplicio para ti y para ellos. Intentar cuidar de la higiene de alguien que quieres mientras no para de llorar resulta arduamente complicado. Por ello, si les acostumbras a la ducha desde que sean pequeños, seguro que es mucho más fácil que con el paso del tiempo le pillen el gusto a relajarse con bajo este chorro caliente.
Ahora ya tienes en tu mano todas las herramientas para dejar tu hogar totalmente preparado para la llegada de tu perro. Te toca poner todo lo que tienes en marcha para que este reto salga bien. Y, recuerda, que si tu hogar se te ha quedado pequeño, siempre puedes comprar tu nueva casa en Globaliza.