Aunque ahora no sea el plato que más apetezca a causa de las bajas temperaturas, hay pocos alimentos que tengan un papel más tradicional en España que el de esta delicia veraniega. Sin embargo, llevas disfrutándolo toda la vida y nunca te has parado a plantearte cuál es su origen, ¿verdad? Ya va siendo hora de que lo conozcas. Hoy te contamos cómo surgió la idea del gazpacho.
Gazpacho: un legado de la España mozárabe
La palabra Gazpacho hace referencia en mozárabe a fragmento. Y es que, si lo piensas, hubiera habido pocas maneras más acertadas de definirlo que la susodicha.
No obstante, una cuestión es su denominación y otra es su origen. Rastro que es bastante complicado de rastrear. No se tienen registros de cuándo fue la primera ocasión en la que una persona preparó este plato, pero hay una fecha que actúa como límite en el pasado: 1492. Si tenemos en cuenta que muchos de sus ingredientes provenían de América, antes de que llegáramos a ella es difícil pensar que hubiera sido posible.
Un plato para la nobleza
Otra circunstancia que parece probada es la de que se trata de un preparado que comenzó probándose en la nobleza. Aun así, con el paso del tiempo, todo indica a que no le acabaron de pillar el gusto y que se convirtió en un alimento propio del pueblo.
Después de todo, ¿conoces más alimentos que sienten tan bien en un día caluroso de verano? Esta es la razón por la que, ante todo, se consumía en Andalucía. Cada ciudad tenía su variante particular, aunque todos tenían algo en común: ayudaba a enfrentarse a las elevadas temperaturas estivales.
¿De qué comida tradicional española te gustaría conocer su origen?
Hoy te hemos querido contar el origen del gazpacho, pero podemos acompañarte en este camino con respecto de cualquier plato tradicional. Para ello, simplemente déjanos en los comentarios tus propuestas y nosotros encontraremos el hilo del que tirar.