¿Ha llegado ese momento en el que ha surgido en tu mente la idea de bombero de ir a trabajar a un coworking?
Después llega ese maravilloso instante en el que te dices que oye, pues no es tan mala idea.
Al igual que contigo, está floreciendo en muchas mentes de todo el mundo. ¡Es la gripe del coworking! Como este virus, está expandiéndose por toda España y cada vez son más los que se suman.
¿Te llama la atención? Lo hará todavía más cuando saborees estas situaciones:
- Trabajarías alejado de la rutina de tu hogar de siempre.
- Disfrutarías de las ventajas de una oficina ahorrando mucho dinero.
- Conocerías a un socio y catapultarías tu negocio
Parece que los trovadores hubieran tenido mucho trabajo contando las bondades del coworking. Una lástima que la evolución los haya sustituido por Twitter. Que 9 de cada 10 cambios sean a mejor ya es motivo de júbilo.
Coworking: la esperanza que lucha contra los jinetes del apocalipsis
Si prestaste atención hace unas cuantas semana a la última clase, esta noticia la debías esperar.
Cuando te contamos lo que había dicho el Informe del Mercado de Forcadell quisimos destacar el dato de que las oficinas se habían convertido en el producto de inversión favorito del mercado.
¿Y qué es un coworking? Una oficina. A su modo. Pero por ahora los clasificamos aquí dentro.
Pero claro, si sigues más noticias, seguro que también te ha llegado ese run run que habla de burbuja, y de estallidos y de que los cuatro jinetes del apocalipsis se acercan por el horizonte por el fracaso de WeWork en su salida a bolsa.
Vaya, que si no los tienes ya en casa es porque se han entretenido en Andalucía con unas cervecitas.
Así que entre que nuestros cuatro amigos superan la resaca y la modorra del sur y destruyen todos los coworkings del mundo, yo te quiero contar todo lo que necesitas saber sobre un coworking.
Y me comprometo a hacerlo sin tanto sensacionalismo barato de titulares rimbombantes.
¿Qué es un coworking?
¿Te imaginas que entraras en un portal inmobiliario y no te contaran qué es un coworking? Es como si entraras en un diario nacional y te desinformaran con fines ocultos. Oh, espera.
Como siempre, nosotros avanzamos contracorriente y nos mantenemos con la meta de informarte con la fidelidad que mereces. Que seremos más raros que un perro verde, pero nos tienes que querer así.
Un coworking es un espacio compartido de trabajo en el que autónomos, teletrabajadores y empresarios —creo que no nos dejamos a nadie— se reúnen para trabajar cada uno en sus propios proyectos.
Esta última matización es importante. Porque si trabajaran todos juntitos sería una oficina normal.
Y, por una vez, esto del coworking es un término para una idea nueva y los marketers de turno no se han dedicado a renombrar en inglés lo que ya conocías para vendértelo como innovación.
¡Aleluya!
Al final un coworking es un lugar donde podrían acudir todos los miembros de tu familia que no se hablan y trabajar por separado sin molestarse. Además, estos espacios siempre cuentan con salas comunes para reunirse, así que podrían meterse los unos con lo otros en zonas acondicionadas.
Como yo sé que eres una persona avispada y estoy seguro de que en tu cabeza se ha encendido esa bombilla de lo escéptico, quiero contarte la diferencia entre coworking y oficina compartida.
Porque si te has dado cuenta, por ahora no te he dicho nada que sea diferente a un edificio grandes con muchas empresas.
Pero es que aquí tenemos a un protagonista inesperado que es la clave de que los trabajadores prefieran los coworking a trabajar desde su casa. Quiero decir, además salvarte de los ruidos molestos de tu vecino.
La figura del gestor.
El gestor: porque no todos los héroes llevan capa
¿Acudirá con una llamada en el cielo? No. ¿Viste mallas y tiene unos abdominales de lujo? Puede. ¿Te salvará de grandes males y ladrones de tiempo? Seguro.
El gestor es la estrella del coworking. Es el sol de tu nuevo sistema solar. Es quien trabaja para que tú —yo ya me he convencido de que vas a luchar por tus sueños en un coworking, ahora no me puedes dejar tirado— y el resto tenéis todas las comodidades que merecéis.
¿Y sabes cuál es la más importante de todas? Construir sinergias entre todos vosotros. Es una oportunidad única para sumar.
¿Qué ganarás si pasas de tu casa a un coworking?
Mira, yo estoy convencido de que a nivel emocional estás convencido de que un coworking es el lugar que necesitas para que tu negocio pueda darlo todo.
Pero, claro, con esa mente de empresario que tienes, también necesitas números, ¿verdad?
Me parece bien. Siéntate. Dale un trago a tu café —espero que estés leyendo este artículo con uno— y seguimos.
- Disfruta de un espacio propio y zonas comunes para todos. Dispondrás de un lugar que acomodarás para ti, tus manías y tus trabajos y espacios como salas de reuniones que podrás usar cuando las necesites.
- Flexibilidad en el tiempo de uso y contratos adaptados a tus necesidades. ¿Cuánto tiempo planeas disfrutar de los servicios del coworking? ¿Y si te surge la oportunidad de tu vida? Todo ello está planteado en contratos muy versátiles.
- Construye sinergias con tus compañeros. ¿Que ya te habíamos hablado de sinergias? Vaya, parece que es tan importante que no podemos dejar de decirlo. ¡Sinergias! ¿Otra vez?
¿Por qué los Jinetes del Apolcalipsis quieren desterrar los coworkings?
¿Que me estás diciendo que no vienen los jinetes del apocalipsis? ¿Que no estamos en el día del juicio final para los coworkings? Espera, ¿es en serio?
Con las noticias que se pueden leer en los grandes medios me extraña que el mundo no haya estallado todavía. Si hablan de fracaso, catástrofes y calamidades. Palabras bonitas ni una, vaya.
Pero mientras muchos periodistas mojan su tinta en la búsqueda de un clic fácil con adjetivos rimbombantes en títulos diseñados para captar tu atención —que leas lo de dentro ya les da más igual—, yo te quiero acercar la opinión de los expertos.
Aunque bueno, qué sabrán ellos, si solo son expertos.
- Comentan que el coworking es un modelo desconocido para muchas personas.
- Y que quienes lo conocen necesitan un tiempo para comprender las bondades de los servicios que ofrece.
- Además, afirman que sus contratos de alquiler estaban por encima de la competencia.
- Y que las obras duplicaron el precio esperado. Quizá lo anterior sea consecuencia de esto.
WeWork: ¿el final de una moda o el asentamiento de un modelo?
Fuente: Pixabay
Lo primero es que ya sabes que en este mundo no hay nada seguro. Un día los taxis se están manifestando contra UBER y Cabify y cuando quieran darse cuenta el coche autónomo les ha adelantado por la derecha.
Aun así, nosotros nos inclinamos por pensar que se trata de un modelo asentado. Una forma de entender el trabajo que todavía no ha despegado, pero que lo hará pronto.
Las innovaciones funcionan así. Necesitan un período de asentamiento y parece que lo está consiguiendo.
Quién sabe, quizá pronto estés tú trabajando en uno de ellos.