¿Es la bicicleta un medio de transporte? Estas ciudades españolas apuestan por un sí

Ha llegado el aroma a revolución a las grandes urbes españolas. La época en la que el vehículo propio era el principal medio de transporte está tornando irrevocablemente a su fin. Su destino se vislumbra en el horizonte y las medidas que se están tomando logran que cada vez deseemos con más fuerza una vuelta y media en nuestra manera de desplazarnos por la ciudad. Ha arribado el tiempo de la bicicleta. Del transporte no contaminante y la vida sana. ¿Sabes cuáles son las mejores ciudades españolas para disfrutar de este medio de transporte?

Mejores ciudades españolas bicicleta

¿Te gusta desplazarte en bicicleta? Las ciudades españolas más preparadas

Admítelo, la comodidad de un vehículo propio no es tanta como todos cuentan. Estamos seguros de que cada mañana te echas las manos a la cabeza. Si madrugar ya es una conducta que debería declararse inconstitucional, realizarlo para quedar atrapado en un atasco no es la definición de gozo que guarda la Real Academia Española. Todo ello sin tener en cuenta el jolgorio que supone aguardar cada noche hasta horas intempestivas para vislumbrar si se aplicará o no el protocolo anticontaminación la jornada siguiente. Las medidas políticas tienden cada vez más a converger en acciones de peatonalización y todo indica que esta rueda no dejará de girar.

Además de por el transporte público, todas estas urbes están desarrollando eficientes sistemas de préstamos de bicicletas y dedican elevadas inversiones a la construcción de vías por donde puedan desplazarse sin poner en peligro su seguridad. ¿Por qué no darles la oportunidad que merecen? Dicen que el amor no se produce en un momento concreto, sino que surge a partir de un proceso continuo. ¿Nos tiramos a la piscina en esta cita a ciegas?

Las cinco mejores ciudades para desplazarse en bicicleta

Pero, ojo, que no nos hemos vuelto majaretas. Al menos no más de lo que estábamos ayer. Somos conscientes de que nadie va a escoger el lugar donde vivir por la adecuación o no de sus fetiches sobre ruedas. Que sí, que locos hay en todas partes, pero la cordura suele imperar a la hora de elegir la ciudad donde pasar la siguiente etapa de nuestra existencia. Hay factores que acostumbran a tener prioridad: el lugar de trabajo, el colegio de los niños… si no cuenta para ti más que la bicicleta, preocúpate.

Aun así, sí que existen momentos en los que esta información puede resultar de interés y no pongamos en duda nuestra sensatez. Si tenemos la opción de mudarnos a dos ciudades puede ser la pluma que decante la balanza. También puede darse la opción de que vivamos en una localidad en la que se nos brindan todas estas oportunidades y no conozcamos que existen. Es algo más habitual de lo que parece. Somos ciegos a lo que tenemos alrededor, desconocemos sus rincones y nos empeñamos en conocer los recovecos del mundo.

Barcelona

No solo es que la ciudad condal esté considerada como la mejor localidad española en la que transportarse por bicicleta, que ya es algo muy importante. Además ocupa el undécimo puesto en el ranking mundial de lugares bikefriendly. Parece un ultraje no pedalear por sus avenidas.

¿Te imaginas yendo cada mañana a tu puesto laboral en bicicleta? No sé tú, pero a nosotros nos encantaría poder ir a trabajar disfrutando de las vistas y el aroma del Mediterráneo en lugar de estar encerrados en un armatoste de metal en el que ya nos hemos aprendido todas las canciones que guardan nuestros antiguos CD.

Para que te hagas una idea de la magnificencia de su despliegue en el ámbito de la bicicleta, su carril bici abarca más de 200 kilómetros (en línea recta podría recorrer un quinto de España). Existen más de 6000 bicicletas disponibles para ser prestadas.

El que no quiere ir a trabajar pedaleando es porque no quiere en Barcelona.

Sevilla

Sevilla tiene un color especial y sobre ruedas se siente mucho más. Pasear por la capital andaluza, disfrutar de sus aromas y de la maravillosa melodía del acento de quienes la pueblan es un placer que se puede hallar en muy pocas localidades. Además, para aquellos que sientan que su capacidad física es una limitación para transportarse en bicicleta, tenemos una buena noticia: se trata de una ciudad que es prácticamente llana en su totalidad.

En cifras, cuenta con más de 180 kilómetros de carril bici. Solo veinte menos que Barcelona. Y pone a disposición de sus ciudadanos 2.600 unidades en préstamo. No en vano está considerada como una de las mejores del mundo en este aspecto.

Eso sí, en verano hay que tener cuidado con las temperaturas. Que una cosa es disfrutar de la templanza del lugar y otra es cocerse cuando se superen los cuarenta grados. Circulad por la sombra y evitad esfuerzos excesivos, que llega la época estival.

Valencia

Al igual que Sevilla, se trata de una ciudad llana. De ella no se dice que tiene un color especial, pero sí que es una de las localidades que resulta más interesante visitar desde la altura de una bicicleta. Valencia guarda miles de secretos y a pie vas a necesitar mucho tiempo para conocerlos todos.

Si discurrimos por el siempre interesante lenguaje de las cifras, se puede decir que tiene 120 kilómetros de carril disponible para todos aquellos que esgrimen la bici como principal medio de transporte, así como 2.750 bicicletas disponibles para todo aquel que necesite una prestada.

¿A ti no te apetece darte una vuelta este verano por sus calles?

Zaragoza

Zaragoza es una de las ciudades españolas que está demostrando tener como objetivo una gran apuesta por la expansión y fomento del uso de la bicicleta. En los últimos quince años ha multiplicado por diez los kilómetros de carril bici disponibles y en la actualidad ya alcanzan los 130.

A ello se le suma una oferta de bicicletas en préstamos cada vez más elevada. La ciudad maña tiene disponibles 1.300 para préstamo. Y es que a quién no le apetecería darse una vuelta un domingo por la tarde. Disfrutar de la magia e historias que encierra esta ciudad no tiene precio.

Madrid

Madrid tiene un proyecto muy ambicioso en cuanto al uso de la bicicleta. Se ha propuesto que exista una estación pública cada 300 metros. Un objetivo nada desdeñable y del que cada día están más cerca.

La capital española dio un paso de gigante. Lo hizo el día que permitió que la tarjeta del abono transporte diera acceso también a las bicicletas de alquiler sin necesidad de abonar una cantidad superior. Estas abarcan 2.028 y ya hay 195 kilómetros de carril bici por los que circular. Además, en ellos no se contabilizan los de las localidades periféricas, todos ellos unidos para poder desplazarte de manera interurbana.

Verano, bicicleta y vida sana

El verano se encuentra a la vuelta de la esquina. Hará chas y aparecerá a nuestro lado. En una época como esta, ¿no sientes que tu cuerpo te pide desplazarte de esta manera?

Ya no es solo por las implicaciones a nivel de salud que tiene. Desplazarse en bicicleta es bueno también a nivel mental. Nos permite estar en contacto con aire fresco, escapar de la contaminación y poder discurrir por las ciudades de una manera que no conocemos. Nuestro espíritu aventurero está al alza solo con pensarlo.

Todo ello sin contar que las ciudades europeas también están apostando cada vez más por este medio de transporte. Países como Holanda están a años de diferencia. Pero ello no insta a que no podamos aprender y acercarnos poco a poco. Si hemos importado todo lo que hemos querido, ¿por qué nos vamos a dejar esta idea en el tintero?

El mundo está cambiando y podemos adaptarnos o morir. El transporte privado cada vez tiene menos sentido en una realidad tan preocupada por la contaminación. En esta realidad la opción de la bicicleta ha llegado con fuerza. Parece que no va a parar de ganar presencia. ¿Estás preparado para aprovecharte de esta nueva realidad? ¿Y si comienzas a instaurar la rutina este verano?

Mientras tanto, aquí te hemos presentado las cinco mejores ciudades para circular en bicicleta. Si vives en una de ella no dejes de pasar la oportunidad de aprovecharlo.

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